“El mayor regalo que te puede dar esta profesión es el reconocimiento de la gente”
Xavi Aguado, el futbolista que más veces ha vestido la camiseta del Real Zaragoza en competición oficial. Estudió empresariales. Está casado y tiene dos hijos de 9 y 7 años. No tiene ninguna duda de que la Liga española es la primera del mundo. Se confiesa seguidor de Guardiola, Romario e Iniesta. Como entrenador prefiere a Lillo. Aunque muy catalán confiesa que se siente muy querido en Aragón.
Fecha y lugar de nacimiento: 5 de junio de 1968, Badalona.
Debut con el Real Zaragoza: 9 de septiembre de 1990 ante el C.D. Logroñés.
Último partido oficial: 6 de febrero de 2002 aunque se retiró en 2003.
Palmarés: 473 partidos oficiales, 29 goles, 21 expulsiones (18 de ellas en partidos de Liga), 2 Copas del Rey y una Recopa de Europa.
- ¿En qué situación cree que se encuentra el Real Zaragoza en estos momentos?
Actualmente el Zaragoza cuenta con 18 de los mejores jugadores que ha tenido nunca el equipo. El problema es que dos o tres llegaron tarde por la Copa América y que hay un problema de defensa debido a la juventud de los jugadores. Otro punto importante es que el entrenador todavía no ha dado con el equipo ideal. Además las discusiones entre Aimar y D’alessandro, por ejemplo, no son lo más adecuado para crear un buen ambiente de vestuario.
- ¿Es usted de los que opina que se peca de individualismo?
Creo que más importante que el estado mental de los jugadores es su estado físico porque, como ya he dicho, algunos llegaron tarde por la Copa América y eso les ha condicionado bastante. De todos modos D’alessandro, Aimar y Oliveira tienen un comportamiento egoísta.
-¿Ve necesario nuevos fichajes en el mercado de invierno?
El mercado de invierno es complicado aunque un central podría venir bien.
-¿Y alguna salida?
Es complicado pero creo que ningún futbolista está olvidado o apartado del equipo.
-¿Falta la figura de un capitán sólido dentro del equipo?
Siempre ayuda un líder y quizá Ayala sea esa figura; pero lo que si se nota es la falta de implicación de los grandes jugadores. En los momentos duros es cuando los jugadores de peso han de dar la cara y apoyar al resto.
- ¿No tiene la sensación de que la cantera del Club no está bien cuidada?
No, todo lo contrario, el problema es que el filial está en categorías muy inferiores. Además la cantera es costosa y es un dinero que suele caer en saco roto.
- De la cantera es uno de los mejores jugadores con los que cuenta hoy cuenta el Zaragoza: Alberto Zapater. Se le está tratando de forma agresiva desde algunos medios...
No. Es un futbolista duro pero no violento. Lo que sí es cierto es que la prensa condiciona el prestigio o cuelga el “san benito” a algunos jugadores. En el caso de Zapater fue por una entrada a Messi y sólo la prensa catalana habló mal de él por ello.
- Usted conoce bien lo que significa jugar duro, quizá por ello haya sido expulsado en 21 ocasiones.
Bueno... no quiero hacerme el mártir pero la verdad es que he sido uno de los futbolistas menos agresivos aunque siempre he tenido claro que mi objetivo era defender la portería. Yo además tuve la mala suerte de debutar en primera con una ley de expulsión que te mandaba a la calle de inmediato, tanto que de las 18 expulsiones en Liga, 12 o 13 han sido por cosas tan absurdas como pedirle el tiempo al árbitro una vez sobrepasados los minutos reglamentarios. En fin, que ahora parece increíble pero a alguien había que expulsar... y mi padre me dijo que fuese siempre el primero en todo, aunque fuese malo (se ríe).
-¿Quizá esas expulsiones las mereciesen más otros jugadores, como Pablo Alfaro?
No quiero decir eso, es amigo íntimo desde que lo conocí aquí; pero sí es cierto que era un jugador más fuerte, más viril, que jugaba con más intensidad y más contacto que yo. Él también ha tenido que soportar esa “mala fama”. Todo por no jugar en un equipo de los grandes. Fernando Hierro, por ejemplo, ha tenido las mismas tarjetas amarillas que yo pero no ha recibido el mismo trato de la prensa. Lo que está claro es que la prensa deportiva nacional siempre ha intentado ocultar las carencias de los equipos grandes, como el Madrid o el Barça.
-¿Quiere decir que si hubiese jugado en un equipo como el Real Madrid o el Barça no hubiese tenido tanta fama de cañero o no hubiese acumulado tantas tarjetas?
Sí, porque hay que tener en cuenta que el árbitro es una persona como el resto, que lee la prensa, que ve la tele... y si los medios te ponen esa fama, él está alerta y en cuanto haces algo te saca la tarjeta. La prensa si quiere condicionar condiciona tanto al público como a los árbitros. Desgraciadamente mucha gente no tiene criterio propio y se deja influenciar bastante.
- Aún con todo, ¿se ve como un referente del Real Zaragoza?
No, todavía no hay una lejanía en el tiempo, un recuerdo. Hace muy poco tiempo que me retiré y aún así aparezco en las quinielas de muchos mejores onces. Para mí el mero hecho de aparecer en esas quinielas y en el recuerdo de la gente es un gran premio, muestra del trabajo bien hecho. El mayor regalo que te puede dar esta profesión es el reconocimiento de la gente. Suele pensarse que lo mejor de ser futbolista es ganar dinero y títulos pero lo que queda es el cariño de la afición.
- Le ilusiona el apoyo de muchos zaragocistas pero, ¿qué le dice el número 6?
Cada vez que lo veo, sobre todo ahora, un orgullo, porque que se identifique ese numero conmigo es una muestra más de ese trabajo bien hecho del que te hablaba. También tengo la suerte de que después la han vestido grandes jugadores como Gabi Milito, y ahora Diogo.
- ¿Este orgullo se refleja en momentos puntuales?
En la final de la Recopa o la vuelta a primera división, por ejemplo. Sobre todo poder hacer feliz a la gente. Es muy enriquecedor.
- ¿Siente que le ha quedado algo por hacer dentro del fútbol? Como ganar una Liga, por ejemplo.
Ser campeón de Liga es algo muy complicado y muy difícil.
-¿Le gustaría ser entrenador?
El año pasado me saque el titulo pero no lo tengo en mente. He pasado el periodo de formación y las prácticas pero nunca se sabe. Además ser entrenador de primera significa estar apartado de la familia y de muchas cosas que me tiran para atrás. No me atrae el estilo de vida aunque yo creo que tengo carácter para ello.
- Si no hubieses podido ser futbolista, ¿qué profesión habrías elegido?
Mujer de futbolista (se ríe). No, en serio, de pequeño soñaba con ser “broker”, sin embargo, tengo una promotora inmobiliaria y una empresa de energías renovables.
Xavi Aguado, el futbolista que más veces ha vestido la camiseta del Real Zaragoza en competición oficial. Estudió empresariales. Está casado y tiene dos hijos de 9 y 7 años. No tiene ninguna duda de que la Liga española es la primera del mundo. Se confiesa seguidor de Guardiola, Romario e Iniesta. Como entrenador prefiere a Lillo. Aunque muy catalán confiesa que se siente muy querido en Aragón.
Fecha y lugar de nacimiento: 5 de junio de 1968, Badalona.
Debut con el Real Zaragoza: 9 de septiembre de 1990 ante el C.D. Logroñés.
Último partido oficial: 6 de febrero de 2002 aunque se retiró en 2003.
Palmarés: 473 partidos oficiales, 29 goles, 21 expulsiones (18 de ellas en partidos de Liga), 2 Copas del Rey y una Recopa de Europa.
- ¿En qué situación cree que se encuentra el Real Zaragoza en estos momentos?
Actualmente el Zaragoza cuenta con 18 de los mejores jugadores que ha tenido nunca el equipo. El problema es que dos o tres llegaron tarde por la Copa América y que hay un problema de defensa debido a la juventud de los jugadores. Otro punto importante es que el entrenador todavía no ha dado con el equipo ideal. Además las discusiones entre Aimar y D’alessandro, por ejemplo, no son lo más adecuado para crear un buen ambiente de vestuario.
- ¿Es usted de los que opina que se peca de individualismo?
Creo que más importante que el estado mental de los jugadores es su estado físico porque, como ya he dicho, algunos llegaron tarde por la Copa América y eso les ha condicionado bastante. De todos modos D’alessandro, Aimar y Oliveira tienen un comportamiento egoísta.
-¿Ve necesario nuevos fichajes en el mercado de invierno?
El mercado de invierno es complicado aunque un central podría venir bien.
-¿Y alguna salida?
Es complicado pero creo que ningún futbolista está olvidado o apartado del equipo.
-¿Falta la figura de un capitán sólido dentro del equipo?
Siempre ayuda un líder y quizá Ayala sea esa figura; pero lo que si se nota es la falta de implicación de los grandes jugadores. En los momentos duros es cuando los jugadores de peso han de dar la cara y apoyar al resto.
- ¿No tiene la sensación de que la cantera del Club no está bien cuidada?
No, todo lo contrario, el problema es que el filial está en categorías muy inferiores. Además la cantera es costosa y es un dinero que suele caer en saco roto.
- De la cantera es uno de los mejores jugadores con los que cuenta hoy cuenta el Zaragoza: Alberto Zapater. Se le está tratando de forma agresiva desde algunos medios...
No. Es un futbolista duro pero no violento. Lo que sí es cierto es que la prensa condiciona el prestigio o cuelga el “san benito” a algunos jugadores. En el caso de Zapater fue por una entrada a Messi y sólo la prensa catalana habló mal de él por ello.
- Usted conoce bien lo que significa jugar duro, quizá por ello haya sido expulsado en 21 ocasiones.
Bueno... no quiero hacerme el mártir pero la verdad es que he sido uno de los futbolistas menos agresivos aunque siempre he tenido claro que mi objetivo era defender la portería. Yo además tuve la mala suerte de debutar en primera con una ley de expulsión que te mandaba a la calle de inmediato, tanto que de las 18 expulsiones en Liga, 12 o 13 han sido por cosas tan absurdas como pedirle el tiempo al árbitro una vez sobrepasados los minutos reglamentarios. En fin, que ahora parece increíble pero a alguien había que expulsar... y mi padre me dijo que fuese siempre el primero en todo, aunque fuese malo (se ríe).
-¿Quizá esas expulsiones las mereciesen más otros jugadores, como Pablo Alfaro?
No quiero decir eso, es amigo íntimo desde que lo conocí aquí; pero sí es cierto que era un jugador más fuerte, más viril, que jugaba con más intensidad y más contacto que yo. Él también ha tenido que soportar esa “mala fama”. Todo por no jugar en un equipo de los grandes. Fernando Hierro, por ejemplo, ha tenido las mismas tarjetas amarillas que yo pero no ha recibido el mismo trato de la prensa. Lo que está claro es que la prensa deportiva nacional siempre ha intentado ocultar las carencias de los equipos grandes, como el Madrid o el Barça.
-¿Quiere decir que si hubiese jugado en un equipo como el Real Madrid o el Barça no hubiese tenido tanta fama de cañero o no hubiese acumulado tantas tarjetas?
Sí, porque hay que tener en cuenta que el árbitro es una persona como el resto, que lee la prensa, que ve la tele... y si los medios te ponen esa fama, él está alerta y en cuanto haces algo te saca la tarjeta. La prensa si quiere condicionar condiciona tanto al público como a los árbitros. Desgraciadamente mucha gente no tiene criterio propio y se deja influenciar bastante.
- Aún con todo, ¿se ve como un referente del Real Zaragoza?
No, todavía no hay una lejanía en el tiempo, un recuerdo. Hace muy poco tiempo que me retiré y aún así aparezco en las quinielas de muchos mejores onces. Para mí el mero hecho de aparecer en esas quinielas y en el recuerdo de la gente es un gran premio, muestra del trabajo bien hecho. El mayor regalo que te puede dar esta profesión es el reconocimiento de la gente. Suele pensarse que lo mejor de ser futbolista es ganar dinero y títulos pero lo que queda es el cariño de la afición.
- Le ilusiona el apoyo de muchos zaragocistas pero, ¿qué le dice el número 6?
Cada vez que lo veo, sobre todo ahora, un orgullo, porque que se identifique ese numero conmigo es una muestra más de ese trabajo bien hecho del que te hablaba. También tengo la suerte de que después la han vestido grandes jugadores como Gabi Milito, y ahora Diogo.
- ¿Este orgullo se refleja en momentos puntuales?
En la final de la Recopa o la vuelta a primera división, por ejemplo. Sobre todo poder hacer feliz a la gente. Es muy enriquecedor.
- ¿Siente que le ha quedado algo por hacer dentro del fútbol? Como ganar una Liga, por ejemplo.
Ser campeón de Liga es algo muy complicado y muy difícil.
-¿Le gustaría ser entrenador?
El año pasado me saque el titulo pero no lo tengo en mente. He pasado el periodo de formación y las prácticas pero nunca se sabe. Además ser entrenador de primera significa estar apartado de la familia y de muchas cosas que me tiran para atrás. No me atrae el estilo de vida aunque yo creo que tengo carácter para ello.
- Si no hubieses podido ser futbolista, ¿qué profesión habrías elegido?
Mujer de futbolista (se ríe). No, en serio, de pequeño soñaba con ser “broker”, sin embargo, tengo una promotora inmobiliaria y una empresa de energías renovables.
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