Sin pilas

Son las 22:05 de la noche y salgo de trabajar, aunque por contrato solo me pagan hasta las nueve. ¿Todo por qué? Porque la gente confunde a las dependientas con chachas y, que yo sepa, sirvienta no es sinónimo de dependienta. Y eso que ya me lo dijeron cuando firmé contrato: "tienes que ser servicial"... servicial, no la criada de nadie. Pero las señoras no entienden la diferencia. Tan solo una semana ha hecho falta para hartarme del trabajo de la tienda, mejor dicho, de las mujeres que acuden a la tienda: tiran la ropa por el suelo, te miran por encima del hombro, desordenan todo, no respetan tu trabajo... Y para colmo de males hoy solo hemos estado dos, aguanta toda esa marabunta solo entre dos!!! Pero si en lugar de gente parecía que había pasado un huracán!!! Así que estoy sin pilas. Para colmo de males cuando yo salía de la tienda subía medio Zaragoza por Independencia de ver no se qué procesión. Intento coger un bus para llegar a casa pero es imposible por lo que al final no me queda otra que subir en el de San Fernando. Me duelen los pies. Intento ir rápida porque tengo hambre y muchas ganas de llegar a mi sofá, a descansar; pero la gente va a su bola y se ponen por mi camino, así que más que un paseo parece que estoy haciendo una carrera de obstáculos. ¿Obstáculos? Una bicicleta!! Pero por qué no hay carril bici en Zaragoza!!?? Así que... estoy sin pilas.